El lipofilling mamario, también conocido como transferencia de grasa autóloga o injerto de grasa, es un procedimiento estético en el que se extrae grasa de una parte del cuerpo y se inyecta en los senos para aumentar su volumen o mejorar su forma. Esto es lo que debe saber al respecto:
Procedimiento
- Cosecha de grasa: La grasa suele extraerse de zonas como el abdomen, los muslos o los flancos mediante liposucción.
- Tratamiento: La grasa extraída se procesa para separar las células grasas viables de otros componentes.
- Inyección: La grasa purificada se inyecta en el tejido mamario en pequeñas cantidades para conseguir un aumento de aspecto natural.
Beneficios
- Resultados naturales: Como la grasa procede de su propio cuerpo, los resultados suelen ser más naturales que los implantes.
- Doble prestación: Puede contornear la zona donante (por ejemplo, abdomen o muslos) al tiempo que aumenta el volumen mamario.
Riesgos y consideraciones
- Resorción: Es posible que no toda la grasa inyectada sobreviva; parte puede ser absorbida por el organismo con el tiempo.
- Sesiones múltiples: A veces, se necesita más de una sesión para conseguir el volumen deseado.
- Complicaciones: Existen riesgos como la infección, la asimetría o los cambios en la textura de las mamas.
Recuperación
- Fase inicial: Puede haber hinchazón, hematomas y dolor tanto en la zona donante como en la receptora.
- Resultados finales: Pueden pasar varios meses hasta ver el resultado final, a medida que la grasa se asienta y el cuerpo se adapta.
Candidatos ideales
- Buena salud: En general, las personas con buena salud y expectativas realistas son candidatas adecuadas.
- Peso estable: Los candidatos deben tener un peso estable, ya que los cambios significativos de peso pueden afectar a los resultados.
Es una buena idea consultar a un cirujano plástico colegiado para saber si el lipofilling mamario es adecuado para usted y conocer los posibles resultados y riesgos.